domingo, 8 de noviembre de 2015

¿... Y la europea?

 “Un acto de solidaridad europea”, de esta forma califica Bruselas la llegada masiva de inmigrantes Sirios a Europa. Que lástima, la UE ya no es lo que era. De toda la vida la solidaridad ha consistido en crujir a préstamos económicos a los países miembros. Sin embargo, ahora llamamos solidaridad a que cientos de miles de personas que huyen de una guerra puedan encontrar un hogar en Europa.

Es cierto que tenemos que buscar una solución rápida, en esto estaremos todos de acuerdo. Aunque considero que no era necesario perturbar  ni nuestro bienestar ni  nuestra conciencia consumista. En poco más de tres meses, hemos pasado de tener un gobierno perfectamente centrado en hacer crecer nuestras empresas, a tener un gobierno que da oportunidades a personas que lo han perdido todo ¡Brutal! Yo pagando impuestos para lucir un espléndido ejército y unas esbeltas catedrales mientras mi gobierno despilfarra alimentando a quienes pasan hambre. Esto hace que me pregunte ¿Qué será lo próximo? ¿Qué tengan acceso a la salud pública? Menos mal que Ciudadanos está empezando a coger fuerza…

A decir verdad, no me parece mal que en mi comunidad se acepten a uno o a dos de esos inmigrantes, pero ¿A dieciséis? Qué locura, ni que estuvieran los tiempos como para andar regalando casas a la gente y esto no es todo, seguro que además pretenden darles un trabajo, solo espero que sea sin contrato indefinido y sin acceso a la seguridad social.

Pero, resulta que, además, muchos de esos inmigrantes son terroristas islámicos que pretenden poner fin a la democracia en nuestro país. Ya sabéis, esa democracia que tan soberanos nos hace.

El caso es que he pensado en una solución, lógica y de lo más razonable. Pero antes de nada, agradecer al gobierno húngaro esa decorosa valla metálica y esa simbólica multa de 5000 euros a quien ose cruzarla. Eso sí que es iniciativa política, acorde con la Europa de los valores. Tampoco quiero extenderme demasiado, de tal forma que procederé a la explicación de mi propuesta. En primer lugar debemos conocer el gran problema ¿Han pillado a la reina Letizia con un vestido de la temporada pasada? No, tranquilos, no es tan grave. Hablo de los 124.000 Sirios que están viviendo ilegalmente en Europa ahora mismo.

Visto que las vallas metálicas son fácilmente pasables he pensado en poner en las fronteras puertas giratorias. Algo con lo que los europeos estamos muy familiarizados y nunca falla. Cuando los Sirios lleguen a la frontera entrarán por estas puertas y serán directamente devueltos a Siria. Además, he pensado que los que ya han logrado pasar pueden ser quienes coloquen estas puertas, de modo que la instalación nos salga gratuita y así poder destinar los 140 millones de euros que la UE gasta en fronteras en subir ese precario sueldo que cobran los eurodiputados.

Sabiendo que la Unión Europea cuenta con 12.441 km de frontera terrestre, esta iniciativa no solo daría trabajo a 10 sirios por km sino que también daría trabajo a los propios europeos. Con contrato temporal, por supuesto, de tal forma que bajarán las cifras del paro.


Declaro, desde lo más profundo de mi corazón, que al promover esta iniciativa no busco el interés propio sino el de mi comunidad económica y su ignorante supremacía.
  

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