domingo, 1 de octubre de 2017

Cataluña, te mereces votar.

Rajoy miente, el Rey se esconde, el PSOE agoniza. El PP se lía a hostias con los catalanes.
¿En qué clase de país vivimos que ante la voluntad del pueblo catalán respondemos con violencia y odio?
No son los catalanes los que están rompiendo la unidad de España. Sois vosotros que traéis los años 60 al 2017. Con vuestros aguiluchos, con vuestra represión policial, con vuestra catalanofobia y con vuestra mente cerrada.
Así no vais a conseguir que Cataluña no se independice, no; Así vais a conseguir que se quiera independizar hasta Lepe.
Fuera a parte de si este referéndum es legal o no, es sobretodo una consecuencia directa de la indignación del pueblo catalán, que no se siente escuchado por el Gobierno de España.
Cataluña, no te vayas, porque lamentaría que la región más progresista, más democrática, más valiente de España se fuera (Andalucía está en una tremenda siesta de la que se tiene aún que despertar).
Pero Cataluña, te mereces votar.
Hoy España ha fracasado, y la Transición ya es historia.
España necesita una nueva constitución.
(Imagen de hoy del Diario londinense The Telegraph)


miércoles, 19 de abril de 2017

CCAA y turismo

     El título irónico de este artículo suscitará la equivocación por parte del curioso de google. Sin embargo, no es del todo falso. Las Comunidades Autónomas son fuente de riqueza per se, ya que producen por su mera existencia un turismo que no existiría si no estas no hubiesen sido proclamadas entre vítores y algazaras, más algazaras que vítores. Y alguna razzia.  Es fácil de entender.
     No tienes interés en hacer turismo, de viajar, porque necesitas ahorrar, ya que no tienes trabajo y además te estás presentando para encontrar uno lo antes posible, digamos, por ejemplo, que preparándote unas oposiciones con mucha concurrencia y, por tanto, competencia. De pronto, a 411 kilómetros según el mapa de Google ofrecen una bolsa extraordinaria en la que, aunque no tengas muchas opciones, deseas entrar por tener alguna más.
     Compruebas que es muy sencilla la solicitud, ya que hoy en día la telemática ha solucionado muchos problemas. Sólo hay que enviar una carta, pero bueno, no es para tanto esa incomodidad. Hasta tal punto nos soluciona la telemática algunos problemas que la institución en cuestión puede comprobar tus delitos sexuales, la veracidad de los datos que ofreces sobre tu identidad, todo ello de un modo autónomo y con sólo tu consentimiento. Todo es genial. Se nota que estamos en el siglo XXI, aunque comenzándolo. ¡Qué nos depararán los próximos decenios!
     Sin embargo, cuando piensas que es una idea excelente, te decides a probar suerte y sigues leyendo los anexos llegas a un punto que no esperabas. Hay un acto de presentación, como mucho 15 días tras el cierre del plazo de entrega de solicitudes. Te dan la posibilidad de que vaya alguien en representación tuya. Pero claro, te das cuenta de que no conoces a nadie a menos de 2 horas del lugar donde presumiblemente se realizará (pues no es un sitio confirmado) dicho acto. Y aún así, enviar a alguien que no es ni de tu familia a dos horas de su hogar, en el caso de que pudiese y quisiese hacerlo, para escuchar 10 minutos de charla, y que se vuelva a su casa, me parece abusar de la confianza de las personas de buena voluntad.
     Piensas que tú podrías ir, de modo que vas a conocer una ciudad nueva, pero resulta que entre los días 7, 8 y 9 después del cierre del plazo de entrega de solicitudes vas  a estar en Barcelona en un viaje ineludible, ya que es una comunión importante. Un lugar mucho más lejano, que implica un gasto grande de los pocos ahorros y encima no te pilla de camino con respecto a la ciudad del acto de presentación. Además de la posibilidad de que pueda caer el acto en uno de esos días.
     En definitiva, las Comunidades Autónomas no buscan, estoy convencido, quitarse gente de fuera, forasteros de otras comunidades, con establecer actos presentación obligatorios en los que debes recorrerte cientos de kilómetros para 5 minutos de cara a cara, en la época de los ordenadores, fibra óptica, internet a máxima velocidad o capacidad de entrar en nuestros datos más personales a través de la red. Solo hay un motivo para que Extremadura haya impuesto esta condición, al igual que hacen el resto (y en otras, otras condiciones peores relacionadas con el idioma), este motivo es que desea que hagamos turismo por sus tierras.

domingo, 23 de octubre de 2016

Unidad desde la Diversidad

            En Abril del año pasado me aventuré a agrupar en un documento de Word todos los conceptos que implicarían un nuevo sistema de organización mundial. Donde hablaba directamente del Cosmopolitismo, Internacionalismo, Mundialismo, Anacionalismo y Globalismo. Haciendo tan solo una mención a la idea de por qué es necesario explorar alguna de estas alternativas al sistema actual.
            En ese documento mencionaba la idea de crear instituciones democráticas de carácter supranacional para hacer frente a problemas que van más allá de los propios estados ya que a día de hoy quienes tienen la capacidad de afrontarlos no se ven interesados en ello.

¿Por qué es necesaria la cooperación internacional?

            Vivimos en un mundo donde el 65% de la población nunca ha hecho una llamada telefónica, el 40% no tiene ni siquiera acceso a la electricidad, más de 1.200 millones de seres humanos no tienen acceso al agua potable y 1.000 millones carecen de vivienda estimable. En este mismo mundo hay entre 80.000 y 100.000 personas que mueren cada día por causas fácilmente evitables como son el hambre y la sed.
 
           Todos estos desoladores datos están localizados en zonas muy concretas del planeta, como son África, América latina y Asia. Además, debemos sumar a estos datos otros muchos de carácter medioambiental. Más de 17 millones de hectáreas de bosques en el mundo son destruidos cada año, más de 3000 millones de toneladas de dióxido carbono se emiten cada año a la atmósfera. Hay más de 1000 especies de animales y 2000 especies de flora en grave peligro de extinción o amenazadas por las actividades del hombre. La tasa de extinción de especies ha aumentado en un 100% en los últimos años.

            Como decía en el segundo párrafo, ni el hambre ni los problemas medioambientales entienden de Estados. Es decir, no dependen de las decisiones tomadas en un consejo de ministros. Por ejemplo: se estima que desde que el hombre mide la temperatura hace unos 150 años (siempre dentro de la época industrial) esta ha aumentado 0,5 °C y se prevé un aumento de 1 °C en el 2020 y de 2 °C en el 2050. Evidentemente un solo estado no puede hacer frente a esta situación, únicamente se encuentra capacitado para legislar en su contra. Es insuficiente.
            En 1972 hay 113 países miembros de la ONU que ven necesaria una cumbre que suponga un punto de inflexión en el desarrollo de la política internacional del medioambiente, denominada “Cumbre de la Tierra de Estocolmo”. Veinte años más tarde, esta vez en Río de Janeiro, 172 gobiernos y diversas ONG constituyeron la segunda cumbre de la Tierra sobre medio ambiente. En esta cumbre se habla de las fuentes alternativas de energía, del apoyo al transporte público y de la escasez de Agua. El logro más reconocido de esta cumbre fue la Convención Marco sobre el Cambio Climático, que más tarde llevaría al Protocolo de Kioto sobre el cambio climático.
            El Protocolo de Kioto es un acuerdo internacional que tiene por objetivo reducir las emisiones de los seis gases de efecto invernadero que causan el calentamiento global, como son el dióxido de carbono, el gas metano o el óxido nitroso. Lo malo es que esto solo es la teoría.
            Estados Unidos, con apenas el 4 % de la población mundial, consume alrededor del 25 % de la energía fósil y es el mayor emisor de gases contaminantes del mundo. Su ex presidente Bill Clinton firmó el acuerdo de Kioto pero el congreso de los EEUU no lo ratificó, en 2001 Bush se retiró del protocolo. España se comprometió a limitar el aumento de sus emisiones un máximo del 15 % en relación al año base, en 2005 ya era del 52%. Canadá abandonó el protocolo en 2011 para no pagar las multas por incumplimiento. En 2013 se abre un segundo periodo que ratifica lo acordado en Kioto que tendrá fin en 2020, Sin embargo, este proceso denotó un débil compromiso de los países industrializados, tales como Estados Unidos, Rusia y Canadá, los cuales decidieron no respaldar la prórroga.
            A pesar de las buenas intenciones de la Organización de las Naciones Unidas y de algunos estados como Ecuador, que ha presentado varias propuestas de cooperación ambiental, nuestro planeta sigue sin un proyecto rígido y respetable que aborde los problemas medioambientales.
            Ahora vamos a hablar del hambre.  El 11 de octubre de 2010, se calculó que el número de personas mal alimentadas en el mundo es más de mil millones, sobre el total de 7 mil millones de habitantes que hay en el mundo.
            La mayoría de las muertes por hambre se deben a la desnutrición permanente. Las familias sencillamente no tienen suficientes alimentos (o tal vez no cuentan con recursos para adquirirlos debido a su carestía). Esto, a su vez, se debe a la extrema pobreza. Alguna de las iniciativas contra el hambre son la Cumbre Latinoamericana sobre Hambre de 2005 que pide un compromiso de los países para erradicar el hambre y otras como la Cumbre mundial contra el hambre de 2006 que dan como fruto una declaración firmada por 113 países.
            Tras la insuficiencia de estas cumbres la Organización para la Agricultura y la Alimentación lanza un proyecto para presionar a los gobiernos a erradicar el hambre. Al mismo tiempo que el Programa Mundial de Alimentos también lanza una iniciativa bajo el nombre de Transferencias de efectivo y cupones para alimentos. Con esta herramienta, el PMA está beneficiando a las personas vulnerables en lugares donde los mercados tienen alimentos disponibles pero la población carece de dinero para pagarlos. De nuevo, resulta insuficiente.
            Además del medioambiente y el hambre hay que hablar de otros muchos aspectos. Como la salud, tratada desde la Organización Mundial de la Salud, la justicia en caso de crímenes de guerra, llevada a cabo por un tribunal mundial, y la fiscalidad.
            A pesar de que la OCDE y la ONG hacen una gran labor en la presión contra los paraísos fiscales y la evasión en general, hay al menos 73 paraísos de este tipo alrededor de todo el mundo. Cada año se pierden en ingresos fiscales 190.000 millones de dólares, que se suman a los más de 7’6 billones. y no solo eso, los datos revelan que 9 de cada 10 de las 200 empresas más grandes del mundo tiene presencia en al menos un paraíso fiscal.
            Yo considero que en materia fiscal la única lucha no debe ser el fin de los paraísos sino la elaboración de un plan fiscal internacional. Quizás esté planteamiento sea una burrada, pero considero que sin democracia económica y sin soberanía no podrá haber democracia. Es sencillo poner en marcha un proyecto de redistribución de la riqueza en todos aquellos lugares donde haya una administración, ya sea local, autonómica o Estatal. Simplemente hay que subir los impuestos a las rentas más altas y bajárselo a las más bajas. Esto no es posible a nivel mundial ya que carecemos de dicha administración o institución.
            Es decir, no solo hay que acabar con los paraísos fiscales y la evasión fiscal, sino que hay que poner en marcha un plan de redistribución de la riqueza, ya que la mayor tasa de desigualdad no se da en ciudades, comunidades autónomas o estados, sino entre países del mundo. Según los últimos datos que ofreció Oxfan Intermón, a día de hoy el 0,7 de la población mundial posee el 45,2% del capital mundial. Advirtiendo, además, de un "aumento descontrolado de la desigualdad" que lastra la lucha contra la pobreza en todo el mundo.
            Los estados más empobrecidos no pueden hacer frente a la pobreza por si solos. Países como Níger, Etiopía, Mali o Burkina Faso (Los 4 más pobres del mundo según el IPM) no pueden emprender políticas de crecimiento debido a la deuda contraída con el FMI, Banco mundial u otros. 1.600 millones de dólares en el caso de Níger.
            En cuanto a la soberanía, el planteamiento es parecido. A pesar de que vivimos supuestamente en democracia, donde los ciudadanos eligen que proyecto político, económico y social quieren para su territorio. Nuestros gobernantes se tienen que enfrentar a un factor que en muchas ocasiones es contrario a su intención política, la dependencia económica. Nadie duda de la importancia que supone para un territorio tener un número importante de empresas: Creación de empleo, contribución al desarrollo de la región, facilitación de la competencia etc. Y las empresas saben lo necesarias que son. Es por ello que cuando el parlamento autonómico aprueba una subida de impuestos a las grandes empresas de la región, para tener así una mayor recaudación que pueda ir destinada a políticas sociales, estas empresas pueden decidir trasladarse a una región anexa y pagar menos impuestos. Creando más paro y llevando a la región a la decadencia económica.
            Por lo tanto, con un plan fiscal internacional se podría poner fin a la descolonización, a la evasión fiscal en paraísos y se podría lograr una redistribución de la riqueza mundial que permita hacer de nuestro planeta un paraíso fundamentado por la igualdad de oportunidades.
            Es la hora de forjar una unión más seria y estable entre los estados. Una unión que permita construir un único pueblo capaz de hacer real la lucha por el medio ambiente, la erradicación de la desigualdad, la guerra y la corrupción. Es realmente necesaria la cooperación internacional para trabajar por la paz y la justicia en un mundo dividido, poluto y egoísta.
            Tenemos que tener en cuenta que construir un único pueblo no significa de ningún modo la homogeneización de los diversos pueblos y culturas, ni tampoco que desaparezcan las soberanías nacionales, pero sí que se auto limiten en lo necesario. Cómo mundialista insisto, pues, en el respeto a la entidad y a la integridad de cada persona en la toma de conciencia de los problemas actuales y en el desarrollo de una actitud cívica y solidaria hacia los demás.
            El mundialismo no engloba un odio hacia la patria propia o el lugar donde se ha nacido o donde se reside. Al contrario de esto, un mundialista desea la prosperidad en dicho lugar. Lo que ocurre es que en su mentalidad creerá que la mejor forma de conseguir prosperidad en la patria es consiguiendo prosperidad en el mundo, de forma que la patria será próspera.

            Nosotros creemos en la unidad desde la diversidad, porque el mundo o es uno o no será.

jueves, 13 de octubre de 2016

El 12 de octubre y la ausencia de debate

     Quería hacer un comentario breve, brevísimo. Ayer fue el día de la Hispanidad (creo que hasta el 87), día nacional de España (desde el 87), o como se conoció durante la Segunda República (desde la primera celebración, antes de la República y hasta los años 50), el día de la Raza. Aprovecho para felicitar a todos los que comparten mi lengua y mi fe, sean de la raza que sean, sean de la nación que sean. Bien, pues ayer fue el día en el que tuiter y facebook se llena de mensajes (enlaces a artículos, cartelitos, algún vídeo, textos) o denostando, criminalizando en algún caso, o ensalzando dicho día. Todo bien, porque todo el mundo tiene derecho a expresarse y a percibir una realidad según sus neuronas y corazón (¿más neuronas?) les da a entender.
     Y mi opinión no es sobre dicho día, o sobre la obra de la corona española en América, sino sobre el nivel de argumentación que he percibido este año. Seguro que desde los orígenes se ha usado, pero no ha sido hasta esta vez que he llevado a cabo esta reflexión.
     Me percaté de que hay quien no denosta el día, pero siente complejos por él (es mi intuición), hasta el punto, que para explicar, o hacer comprensible aquella obra en América, acuden al humor. Por ejemplo, ante un cartel hablando de saqueo y masacres, una respuesta en tuiter fue un recorte de un tuit de una cuenta humorística, en el que se decía algo así que en última instancia, hay que rechazar los movimientos migratorios del homo sapiens sapiens, que desplazaron a los neandertales. Es decir, una reductio ad absurdum con tono humorístico para contestar a un mensaje contra la Conquista de América por parte de España.
     En otro casos se ha usado la parodia, la ironía, etc., recursos que argumentativamente no son válidos pues anulas el debate, ya que se establece un dialogismo que dificulta la respuesta, de modo que para contestar debes establecer muy claro y previamente a qué contestas, si a lo implícito o a lo explícito, si al tono o al enunciado. Frente a esa estrategia propia de quien no quiere colaborar y llevar a cabo un debate sano e intelectual, la mejor respuesta puede ser el silencio.
     Mi opinión, y crítica, en este caso es a la juventud española, que ha perdido o no ha llegado a tener las herramientas intelectuales para entablar un debate sano y razonado que permita una argumentación libre de obstáculos sucios y llena de argumentos no falaces. Hoy en día no sabemos debatir y, quizás, he ahí otro de los problemas que nos encontraremos en un futuro no muy lejano, ya que los que ahora no saben debatir en facebook son los mismos que pretenderán dirigir una empresa, un sindicato, un negocio. El entendimiento está abocado al fracaso. Sobre todo si hay que guiarse por los que debaten con estilos encorsetados aprendidos en escuelas de política, al modo en el que preparan a los políticos del PSOE o de Ciudadanos (por citar casos conocidos).

viernes, 7 de octubre de 2016

José Bretón y la paradoja de la humanidad inhumana.

     El gran problema de hoy en día no es más que el desprecio a la dignidad humana. Y no digo en todos los humanos hacia el resto, pero sí en muchas de las personas que hay a nuestro alrededor. Os propongo una prueba: preguntad a vuestra gente más cercana (incluso a vosotros mismos) si donaríais sangre sabiendo que iría destinada a José Bretón o a alguno de los violadores de San Fermín. La respuesta en muchos casos será que no. Obviamente es una suposición o, más bien, una intuición, pero que no creo que esté desencaminada. La respuesta obedecería, claramente, a los actos horribles que han llevado a cabo estos seres, de los que no cabe duda a ningún humano que haya desarrollado cierta moral de corte cristiano-occidental.
     ¿Qué son esos seres aborrecibles? Sin duda, son personas, nos guste o no nos guste y como tal, a pesar de sus actos inmundos, siguen poseyendo cualidades humanas de nacimiento. ¿La dignidad se pierde? Sin duda, lo que se pierde es la gracia (en un contexto cristiano) o el uso del libre albedrío, cuando estamos poseídos por una moral oscura. Pero poseemos unos valores (aunque ennegrecidos por nuestros actos) que son inalienables. Imborrables. Como digo, aunque nos hayamos perdidos y estemos condenados.
     Como digo, esto provoca que aunque sean seres que merezcan nuestro desprecio, siguen siendo personas y debemos tener esperanza en su conversión, en que recuperen lo perdido, en que limpien su humanidad y pasen a formar parte del común humano con moral. Como tal, nadie debería negar la ayuda a otra persona, aunque haya sido el peor ser del mundo. Esta ayuda no significa ausencia de castigo, pues la penitencia por sus errores debe ser severa (o eso creo). Sin embargo, la ayuda debe ir de la mano de la penitencia. Son, repito, personas.
     Sin embargo, la gente negaría ayuda a estos seres y, además, desearían su muerte, a pesar, como dice Gandalf en El Señor de los Anillos de que no puedan darla. Hay, en definitiva, un desprecio a la vida humana siempre que el otro sea distinto o haya tenido un comportamiento que consideramos deleznable. Nunca pensamos que el que yerra puede reconciliarse consigo mismo y con la sociedad. Nunca se piensa en que dicha persona es, ante todo, persona; un igual que merece esperanza.
     Cuando seamos capaces de tener esto en cuenta, posiblemente el mundo sea mejor.